El torneo Apertura de la Liga tambalea. Si hoy no hay acuerdo con Fabol y no se levanta la huelga decretada por los futbolistas el martes, el Consejo Superior está dispuesto a determinar la cancelación del certamen. Eso ocasionaría que el país se quede sin fútbol profesional durante todo el primer semestre del año.
La luz roja está encendida, sobre todo después de que ayer no hubiera acuerdo entre la Liga y Fabol, aunque hoy se tiene prevista una nueva cita, a la que se incorporarán dirigentes de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y autoridades del Gobierno.
Los dirigentes ligueros se reunieron ayer en Cochabamba y, aunque acordaron mantener absoluta reserva de lo que conversaron, tomaron la decisión de declarar desierto el primer campeonato del año si persiste la postura que califican como intransigente por parte de los jugadores.
El presidente de la Liga, Mauricio Méndez, sin confirmar esa extrema medida, dijo ayer que si persiste el paro, el Consejo Superior “tendrá que tomar otras determinaciones”, porque los clubes —justificó— no pueden sostener a futbolistas que se entrenen durante la semana, pero que no quieran jugar los fines de semana.
“Confío en que no habrá la necesidad de tomar otras medidas y que mañana (hoy) llegaremos a un acuerdo para que el fin de semana haya fútbol en todo el país”, agregó.
Fabol, al anunciar la huelga, oficializó que ésta afecta a los partidos del torneo Apertura, aunque no a los entrenamientos de los 12 equipos que intervienen en el certamen. Esta figura es entendida por los dirigentes como una “maniobra” de los jugadores para evitar descuentos en sus salarios, al mismo tiempo que evita que los clubes puedan recaudar por concepto de los espectáculos futbolísticos.
El paro, en cambio, afecta por completo a la Selección Nacional. Los jugadores han sido instruidos por su agremiación a no presentarse ni siquiera a los entrenamientos, y menos a jugar encuentros amistosos u oficiales.
El técnico de la “Verde”, Erwin Sánchez, convocó el miércoles a 20 futbolistas para el partido amistoso del día 26 frente a Venezuela. Los 15 jugadores que pertenecen a clubes del país están impedidos por la huelga de atender ese llamado en tanto ésta persista. Los otros cinco, que juegan en el exterior, aunque son solidarios con Fabol no pertenecen a este organismo, y tienen la obligación de atender la convocatoria.
En 1993, un conflicto entre la Liga y la agremiación de futbolistas de entonces, por demandas de éstos, ocasionó que la temporada doméstica fuera cancelada. Sólo trabajó la Selección Nacional, al mando de Xabier Azkargorta, que se clasificó al Mundial de Estados Unidos del año siguiente. La competencia local se reanudó tras la eliminatoria —que se jugó bajo el sistema de grupos—, una vez que fueron superadas las diferencias entre dirigentes y futbolistas.
Fuentes de la Liga afirmaron ayer que hay la decisión de parar el fútbol indefinidamente y con ello dejar sin efecto el torneo Apertura, si la medida de presión no es levantada.
Los ligueros quedaron en reunirse el lunes, otra vez en Cochabamba, en caso de que no haya fútbol este fin de semana por el paro. Mientras tanto, hacen consultas para determinar si la huelga es legal o ilegal. En todo caso, creen que Fabol no cumplió todas las normas.
Si la figura jurídica lo permite, incluso los contratos con los futbolistas podrían quedar anulados, y los jugadores impedidos de seguir cobrando por ellos.
La otra mirada
UN PUNTO TRABA
El tema impositivo sigue siendo el único que impide un acuerdo entre dirigentes del fútbol y Fabol. Las otras demandas de los jugadores ya fueron atendidas. La Liga dio curso al seguro social, por el que cada club pagará unos 10 mil dólares. Estas entidades dieron el visto bueno también al contrato único. Asimismo, hay un principio de acuerdo para la vigencia del Tribunal de Resolución de Disputas (TRD), con la implementación de una instancia superior de apelación; mientras ésta sea creada, la FIFA atenderá las demandas planteadas.
DESCONTÓ LA PAZ FC
Bolívar es señalado por Fabol por haber enseñado el camino a otros clubes para que retengan de los salarios de sus futbolistas el 15,5 por ciento por impuestos. El último en aplicar esa medida, ayer, fue La Paz Fútbol Club, que pagó el sueldo de febrero. Según el secretario general de la agremiación, David Paniagua, también lo han hecho los clubes Real Potosí, San José y The Strongest.
Fabol exige que Bolívar y otros clubes devuelvan el dinero descontado
Fabol anunció ayer que el paro no será levantado mientras la FBF y la Liga no atiendan sus demandas, y advirtió que para avanzar en la negociación, primero clubes como Bolívar, que efectuaron un descuento al salario de sus jugadores por concepto de impuestos, deben devolver ese dinero.
El Comité Ejecutivo de la Liga y el directorio de Fabol se reunieron ayer por la tarde en Cochabamba. Después de varias horas de negociaciones no salió humo blanco. Quedaron en volverse a reunir hoy, aunque en una sesión ampliada a la que asistirán dirigentes de la Federación Boliviana y representantes del Gobierno.
“Nosotros continuaremos con la huelga decretada en tanto los clubes que hicieron la retención o descuento, que consideramos es indebido, no devuelvan ese dinero. No hay una norma clara a través de la cual el futbolista deba tributar, por tanto esos descuentos son ilegales”, aseveró el secretario general de Fabol, el abogado David Paniagua.
Insistió en que la postura de los futbolistas no es negarse a tributar, porque “es una obligación de todos hacerlo”, pero en este momento “no hay bases legales” para que clubes como Bolívar, La Paz Fútbol Club, Real Potosí, San José y The Strongest hayan procedido a efectuar un descuento impositivo.
Recalcó que la huelga impide a los jugadores presentarse a partidos de la Liga y atender la convocatoria de la Selección Nacional.
Según el presidente de la Liga, Mauricio Méndez, el acuerdo puede llegar hoy, aunque va a depender de que todas las partes sean flexibles. Destacó la voluntad de diálogo, y sobre todo que el Gobierno haya aceptado involucrarse en el problema. “Es importante que escuche al deporte y atienda sus demandas”, dijo.
Clubes pagarían el total del contrato, no serÍan agentes de retención
Liga propone un impuesto del 13 por ciento para jugadores
Un proyecto de decreto supremo, elaborado por la empresa Acevedo Deloitte a pedido de la Liga, propone que el jugador de fútbol sea incorporado a un régimen a través del cual deba responder por una tributación del 13 por ciento bajo una figura —según entendidos— similar a la de un consultor por producto específico.
La propuesta tiene como propósito la inclusión del deportista profesional con la característica de “contribuyente directo”. Para esta finalidad, éste tendría que registrarse en el Padrón Nacional de Contribuyentes y obtener su Número de Identificación Tributaria (NIT), debiendo solicitar el alta en el registro del Impuesto al Régimen Complementario al Impuesto al Valor Agregado - Contribuyente Directo (RC-IVA - CD).
Esta figura sugiere que el club le pague al jugador el total del salario acordado, que no reciba a cambio ninguna factura de su empleado y tampoco cumpla la función de agente de retención. Pero el futbolista estaría obligado a efectuar declaraciones juradas de sus ingresos trimestrales, directamente ante el Servicio de Impuestos Nacionales (SIN).
El jugador de fútbol podría evitar el pago del 13 por ciento con la presentación de facturas, de cualquier rubro, por el total del monto de sus ingresos; de lo contrario, pagar el total del impuesto o lo que sea determinado según los descargos que efectuase.
El club Bolívar descontó del salario de sus jugadores el 15,5 por ciento (13 por ciento del Impuesto al Valor Agregado IVA y 2,5 por ciento del Impuesto a las Transacciones IT), como si éstos pertenecieran al rubro del “trabajador independiente”, que además está obligado a tributar una vez por año por el Impuesto a la Utilidad. Fabol considera esa retención es ilegal y exigió que la “Academia” devuelva el dinero a sus afiliados.
El proyecto de la Liga intenta flexibilizar la norma tributaria que es general para todos, de acuerdo con la explicación de un entendido. Llevando a los futbolistas a una figura similar a la de consultores por producto específico, no estarían obligados a pagar el Impuesto a las Transacciones ni el Impuesto a la Utilidad. Además, a diferencia del trabajador independiente, que por su servicio entrega una factura y para descargarse sólo se le admiten boletas del mismo rubro, los jugadores podrían presentar las facturas de cualquier rubro, como actualmente sucede con los trabajadores dependientes.
Según la propuesta, el deportista profesional, para inscribirse en este régimen, tendría que presentar ante la administración tributaria los siguientes documentos: contrato deportivo individual que aclare la prestación de sus servicios en el lugar señalado por el club deportivo, suscrito de acuerdo con el Estatuto del Jugador; fotocopia de la cédula de identidad (para deportistas profesionales - no aficionados nacidos en Bolivia) o fotocopia de cédula de extranjero (para los deportistas profesionales - no aficionados nacidos en el exterior).
Rolando Acevedo, representante de la empresa Acevedo Deloitte, explicó que el proyecto tiene como objetivo destrabar el problema tributario de los futbolistas con los clubes, incorporándolos al artículo 2 del Decreto Supremo 21531 que permite liquidar su impuesto de manera práctica, directa y legal mediante el sistema de calcular el 13 por ciento del total de los ingresos trimestrales y sobre ese 13 por ciento descontar dos salarios mínimos nacionales por mes. “Quiero aclarar que esta norma es vigente, no es nueva, simplemente estaríamos incorporando al jugador de fútbol en el artículo 2 del decreto”, dijo.
Según Acevedo, esta norma está dirigida actualmente a las embajadas en Bolivia, organismos internacionales y otros relacionados con instituciones extranjeras que contratan a personas naturales en el territorio boliviano, además del personal que el Gobierno nacional contrata como consultores.
También franquicia y excepción
La Liga también presentó proyectos de ley de Franquicia Deportiva y de Programa Transitorio y Excepción de adeudos tributarios para Entidades Deportivas.
Rolando Acevedo explicó que la Ley de Franquicia Deportiva es una legislación que tiene aplicación en varios países y que ha permitido mejorar el deporte, con participación de la empresa privada.
Cualquier aporte que haga una compañía privada debe ser considerado como un gasto deducible para su contabilidad y el desembolso para el Impuesto de las Utilidades. Además existe una escala de categorización de incentivo al aporte de la empresa privada, de tal manera, y en función de que esa contribución vaya al deporte discapacitado u otros conceptos relacionados con la discapacidad, el Estado permita tener un incentivo del 75 por ciento de ese aporte a los discapacitados como un anticipo al Impuesto a la Utilidad. En la segunda categoría, afirmó, estaría todo lo relacionado con el balompié aficionado, con un 50 por ciento, y finalmente el fútbol profesional con un estímulo de hasta el 25 por ciento. “Ésa es una ley que creemos va a permitir a las empresas privadas ayudar a mejorar el deporte en Bolivia”.
En cuanto a la Excepción de Adeudos Tributarios, Acevedo opinó que existe un vacío legal tributario, pues la Ley 2770 obligaba a reglamentar la relación clubes, jugadores y Estado, y no se la hizo. “Desde ese punto de vista sería injusto e incorrecto pretender calificar o verificar la manera cómo han actuado los clubes pagando sus impuestos”.
Esta ley —sostuvo— va a permitir regularizar los adeudos tributarios de todo el deporte nacional y en especial de los futbolistas, los clubes de fútbol profesional, la Liga y, por supuesto, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).
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