El destino se ensañó con la vida de un gran y memorable dirigente como Don Mauro Cuellar Caballero, quien producto de un paro cardiaco dejó esta vida terrenal con más sentimiento del deber cumplido que apasionamientos no alcanzados, además de lauros, éxitos y alegrías para lo que fue su otra vida -la otra mitad es su familia-, su querido Club Bolívar.
En su trayectoria dirigencial fungió en diferentes estamentos de la dirección del fútbol nacional, fue presidente, asesor y mentor de la Federación Boliviana de Fútbol, fundador de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano con aportes ideológicos que permitieron su crecimiento y asentamiento, fue presidente del club Bolívar destacando como el gran jerarca que conquistó bajo su mando un sitial histórico al ganar el subcampeonato de la Copa Sudamericana el 2004, además de haber conquistado innumerables títulos de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano y participaciones en la Copa Libertadores de América y Copa Sudamericana, hechos que hasta ahora ningún otro dirigente de club del fútbol boliviano alcanzó, en un periodo de diez años.
Sin desmerecer lo que en su momento hizo don Mario Mercado Vaca Guzmán, quien fue otro gran dirigente que hizo mucho por el fútbol boliviano y el club Bolívar.
Mauro Cuellar, abogado de profesión y empresario, asimismo departió en sus 71 años de vida, cargos públicos, cargos honoríficos y responsabilidades en el escenario político, social, cultural y deportivo.
Su verticalismo, su hablar claro y de frente, sin tapujos, lo convirtieron en referente máximo del fútbol nacional, porque más allá de aprobar o desaprobar decisión consideradas buenas o malas, siempre defendió sus ideales contra criterios adversos que además le valieron suspensiones de por vida no solo en la Federación Boliviana de Fútbol sino en el Club Bolívar, porque ese temperamento asomaba a una sombra que no permitía desarrollar las gestiones oscuras que pudieran dañar o beneficiar a la persona o la institución.
Aunque a manera de advertencia y sin vuelta para quienes intentaron taparle la boca, sentenció: “a mi nunca me van a expulsar de Bolívar, porque a Bolívar lo llevó dentro de mí”.
Fue valeroso a la hora de encarar juicios, peleas, discusiones con tal de hacer valer su palabra, hasta por más o menos dinero que tuviera fue internado en la cárcel por procesos que eran de su club y no personales, a ese límite de amor llegó por su amado club Bolívar, fuera de tener la mejor alternativa de salvar su honorabilidad y prestigio hipotecando los bienes de la entidad, pero ni a eso se atrevió porque para el era lo máximo el Club Bolívar.
“Es un mal precedente para el fútbol en general”, comentó Cuellar en esa ocasión cuando abandonaba el recinto carcelario acompañado de varios dirigentes.
“Él estará en los corazones de todos nosotros, fue un gran bolivarista. Espero que sea despedido con todo el cariño que toda la familia espera, porque fue un hombre que demostró las cosas con actos que dejarán un legado y orgullo al club”, dijo Mauro Cuellar Torrico, hijo del extinto.
Cuellar fue sometido por segunda vez a una intervención quirúrgica la noche del lunes, pero su cuerpo no resistió pese a los esfuerzos que realizaron los médicos de turno, según explicó Mario Aramayo, quien estuvo junto a él hasta el último minuto.
El ex presidente de Bolívar nació el 15 de abril de 1949 en la ciudad de Sucre.
De ahí que fue un genio y figura del fútbol boliviano, dentro y fuera de la dirigencia.
Mauro Cuéllar (h)
“No esperábamos las muestras de cariño que nos brindaron, nosotros sabíamos que a mí padre independientemente de todo y de todas las cosas era una persona querida porque era una persona que había trabajado con pasión, con dedicación y con mucho cariño a las cosas que hacia y dentro las cosas que hacia estaba el fútbol, la historia va decir si fue bueno o si fue malo pero los resultados están a la vista”.
Marcelo Paredes
“Siempre vamos a recordar su capacidad, su inteligencia, fue un hombre bastante preparado; en el ámbito futbolístico era un ejemplo para todos los presidentes tanto de los miembros de la Liga como de la Federación que de una u otra manera siempre recurrían a él para solicitarle consejos para mejorar el fútbol boliviano”
Raúl Coca
“El fútbol a perdido uno de los mejores dirigentes que ha aparecido en mucho tiempo, el club Bolívar pierda a uno de sus mentores, a uno de sus gestores de sus triunfos, de todas esas victorias y alegrías que ha tenido la hinchada bolivarista, ustedes recordarán que en su gestión ha sido una de las etapas más gloriosas que vivió el club Bolívar”
Carlos Vargas
“Mauro ha sido uno de los mejores dirigentes de esta última época y gracias a su esfuerzo, su tesón, su manera de manejar el fútbol, con un carácter fuerte desde luego pero con una visión muy amplia y de saber elegir gente para que llegue a la institución, se han hecho muchas cosas, en sus nueve años de periodo que ha tenido como presidente ha logrado once participaciones internacionales, siete títulos y un subcampeonato a nivel sudamericano creo que eso muestra que Mauro era un tipo ganador”.
Juan Carlos Costas
“Él fue dirigente desde muy joven, recuerdo que durante su gestión viene un presidente de FIFA, el señor Joao Havelange, gracias a la intervención de Mauro (Cuellar). Aunque tuve mis grandes discrepancias sería absurdo decir que no le tuve respeto y el gran aprecio. Creo que nuestro fútbol pierde a un dirigente de una brillante generación”.
Daniel Araníbar
“Don Mauro Cuéllar era uno de los pocos conocedores del fútbol boliviano, sin contar los éxitos que logró con el Bolívar ya que él les dio mucho, como el subcampeonato en la Copa Sudamericana, estadísticamente los puso en nivel Confederación en un puesto importante, al igual que a nivel FIFA y ese récord sólo se logró con él”.
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