La colectividad boliviana que reside en Argentina ha sido importante en estos días, ya que obsequió indumentaria de invierno que le cayó como anillo al dedo a la delegación nacional, que no contaba con toda la ropa debido a que varios bolsones con ese material fueron retenidos en la Aduana de Bolivia.
El martes pasado, residentes que viven en la localidad de Benavídez fueron hasta Buenos Aires Fútbol para entregar varias camperas especiales para el frío, por lo que el cuerpo técnico de la verde lo recibió con mucho agrado.
El jueves, por la tarde, fue el turno de residentes que radican en la zona de Escobar que llevaron una bolsa con chulos y cuelleras de material antialérgico. Verde para los jugadores y rojo para el cuerpo técnico. “Gracias a los residentes estamos abrigados”, dijo Gutiérrez, mientras se dirigía a un entrenamiento en el gimnasio.
“Hemos venido entrenando con ropa de abrigo, por momentos con lo que nos regalaron los residentes bolivianos, a los cuales estoy muy agradecido porque quieren a la selección y eso nos compromete mucho más para hacer las cosas mejor”, apuntó el técnico Gustavo Quinteros.
POR FIN LLEGÓ LA ROPA
Desde hoy, el seleccionado tendrá más alternativa, luego de que llegara toda la indumentaria de la marca Walon, que hasta hace unos días estuvo retenida en la aduana de Bolivia, por falta de requisitos en cuanto al ingreso al país.
“Tenemos como 16 bolsones. Estamos desempacando para ver toda la variedad que hay y luego se coordinará con el cuerpo técnico”, indicó Enrique Sanjinés, uno de los utileros de la selección, que las vieron ‘feas’ debido a la poca indumentaria que había hasta el sábado.
Entre los bolsones que llegaron, se encuentran los uniformes oficiales y los alternativos, con los cuales la selección jugará la Copa América. También hay ropa de invierno, algo por ahora muy necesario, ya que hay que recordar que cada miembro de la delegación usa tres vestimentas por día.
LA OTRA MIRADA
Nada impide el trabajo
A pesar de que llovió durante tres días, la selección no paró de entrenarse, porque el predio de Buenos Aires Fútbol cuanta con una chancha sintética, con las medidas oficiales. “En otro lado hubiera sido difícil que se entrene normal”, dijo Osvaldo Brigante, director del complejo, que está muy a gusto por la presencia de Bolivia.
Compran por su cuenta
Algunos jugadores decidieron comprarse ropa de invierno por su cuenta, por lo menos pasó hasta antes de que llegue la ropa. Ronald Raldes ni bien llegó tuvo que ir a un comercial del centro de Tigre para buscar un buzo, pues estaba con ropa informal.
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