En dicho texto se daba cuenta de la decisión que tomó la comisión de disciplina de la FIFA, que se reunió el martes.
“Se les consideró culpables de violación del artículo 62 y del artículo 69 del código de disciplina de la FIFA”, apuntó el comunicado, aludiendo a las irregularidades de “corrupción pasiva” e “influencia ilegal sobre el resultado de un partido” contenido en ese texto regidor de la organización deportiva.
Los partidos concernidos son el 2-1 del Bolivia-Letonia, disputado el pasado 9 de febrero, y el Estonia-Bulgaria, jugado ese día también en Antalya y que terminó 2-2.
Los siete goles de esos amistosos fueron todos anotados a través de penales, circunstancia que hizo que se sospechara del amaño del resultado.
Los partidos fueron organizados por una empresa tailandesa que se hizo con los derechos de ambos duelos.
El pasado mes de marzo, la FIFA abrió un proceso disciplinario contra los árbitros.
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