Con la experiencia reciente, ¿qué reflexiones se hizo sobre la actividad del arbitraje?
Puedo sostener que es una labor ingrata y difícil, porque lo sentí en carne propia. Tengo claro que 89 minutos de un partido la actuación de un árbitro puede ser brillante, y en un minuto se convierte en el ser más indeseable.
¿Considera usted que las críticas muchas veces son muy duras por parte de la dirigencia o de los aficionados?
Si hay algo que está claro en esto, es el hecho de que nuestros detractores se olvidan que un árbitro es humano, y por tanto está expuesto a cometer errores, también considero que se puede tener una mala tarde como cualquier otro referí.
Insinúa, señor Vargas, que ¿usted no estuvo en su tarde, en ocasión del aludido cotejo?
Primero, quiero ser taxativo respecto a las prohibiciones que existen por mandato de la FIFA para que los árbitros no emitan declaraciones, y precisamente por ello estamos impedidos de hacer enjuiciamientos que comprometan nuestra situación personal, por eso que somos portadores de la insignia internacional que todo árbitro aspira a tener.
¿Las críticas que le llovieron luego del partido Wilstermann-Universidad fueron exageradas?
Sabe, vi el video con mi asesor René Orihuela, exárbitro internacional, y llegamos a la conclusión que fueron más errores de apreciación, ahora que como se dieron, ahí está la cuestión. Uno llega a comprender que en esta labor, el compromiso debe ser de todos, esto es del árbitro y los asistentes, porque se debe tomar en cuenta que muchas veces la perspectiva respecto a la visual no es la mejor de donde está el árbitro.
¿Qué reacción provocó en su familia la andanada de críticas que estaban dirigidas a su persona?
Por supuesto que no ha sido una experiencia muy agradable, y quiero pensar que todo fue producto de una mala tarde simplemente y que llegué a preocupar a mi familia, pero si tengo algo bien presente, y que es producto de lo que mi padre, Teodomiro Vargas, que es profesor, me inculcó, y es un concepto valioso para mí. Se debe asumir que cada partido es un examen para un árbitro.
¿Ya le llegó el memorándum?, porque se hizo público que lo iban a castigar.
No tengo conocimiento de eso, tampoco me llamaron, pero si eso sucede, no queda otra que someterse a lo que disponga el Comité de Árbitros.
Es obvio sostener que uno tiene que ser disciplinado, y en mi caso no tengo ninguna duda que haré lo que se disponga.
¿Con qué otra actividad complementa su rutina diaria?
Soy ingeniero civil, y me hice árbitro por influencia de mi padre, porque me sugirió asistir a un curso para árbitros que se dictó en Oruro, y por eso que me gusta este deporte, fui jugador de Estudiantes Frontanilla e Ingenieros, entonces no había donde perderse.
¿Qué experiencia tiene como árbitro FIFA?
La insignia me la gané el año pasado luego de cinco años de búsqueda permanente y de buen trabajo en lo que hacía. Debuté en la AFO en 2007, y en la Liga dirijo desde el 2000.
“Dirigí finales, entre ellas la que jugaron Wilstermann-Aurora, fue en 2010, y también me anoté una semifinal el año pasado, Oriente-The Strongest, en los que no tuve sobresaltos”.
“De esto que me está pasando, que no deja de ser un trauma psicológico, saldré con más fuerza para ser considerado nuevamente, estoy dispuesto a lograrlo”.
morite hijo de puta nos dejaste en la segunda ya t vamos a encontrar y moriras como perro hijo de puta¡¡¡¡¡¡¡¡¡
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