El “Siles” lució radiante

La Prensa



Los hinchas peruanos se hicieron escuchar en el escenario miraflorino.

El estadio Hernando Siles dio la nota, porque ayer se volvió a llenar. Un total de 36.884 personas abarrotaron el escenario miraflorino, y arrojaron la cifra de Bs 2.675.000, la mejor hasta el momento en la actual Eliminatoria. Para Colombia se recaudó 1.813.837 bolivianos, para Chile 2.238.850; y, finalmente, en el encuentro con Paraguay, la más baja hasta el momento, con 523.275.
La gente respondió, y el Siles volvió a mostrarse con sus mejores galas, aunque la nota la dieron los hinchas peruanos que llegaron en buen número, y junto con los residentes en La Paz, a ratos se hicieron escuchar más que los nacionales.
Cuando llegó el gol de Perú, los hinchas de ese país festejaron al unísono: “Perú...Perú...Perú”, mientras que los locales se tomaban la cabeza, pero a diferencia de otras oportunidades silbaron -con la intención de expresar su malestar- muy poco. Luego, la alegría llegó a su nivel máximo con el gol de Chumacero.
En general, el público respondió con un ”Siles” impecable.

"Estoy enojado con el resultado, quisiera haber ganado. Era un juego para ganar”.

Detalles

VUVUZELAS Y CORNETAS

El aficionado peruano fue el más bullanguero de la jornada de ayer. La mayoría estuvo armado con vuvuzelas (especie de trompeta que se hicieron famosas en el Mundial de Sudáfrica 2010) y cornetas; cada vez que su equipo atacaba las hacían sonar. Muchos se quejaron del sonido de estas vuvuzelas, incluso el relator de un programa deportivo dijo al aire “sí que son molestosas esas vuvuzelas”, pero cumplieron con su objetivo de hacerse escuchar en el estadio.

En españa hubo frustración
En España se siguió el partido a la distancia. En Valencia, el programa conducido por Fredy Morales en la cadena Sur no dejó de lamentar el empate. “Es hora del cambio y que se dé oportunidad a gente joven”, dijo Morales tras el empate.

Despedidos como héroes
Tras concluir el cotejo, los aficionados peruanos se asomaron a la puerta principal del Hernando Siles para despedir a su equipo. Cuando salió Markarían, se escuchó una aclamación al unísono.