Opinion
Carlos Chávez y Marcelo Claure pasarán del duelo verbal por los medios de comunicación, a un duelo judicial en tribunales nacionales y de los Estados Unidos. De esta manera una pulseta abierta entre poderosos, se convierte en una pelea por el poder absoluto de nuestro fútbol.
Por lo menos así lo dejaron ver ambos y así se puede entender una disputa que se vienen librando desde hace ya varios meses atrás y que puede estar alcanzando su punto más álgido.
Lo anunciaron ambos durante la pasada semana cuando el presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y el presidente del grupo Baisa (a la cabeza del club Bolívar), respectivamente, se amenazaron con acciones legales uno contra el otro.
Chávez dijo que demandará al presidente de Baisa por daño económico a la FBF y otro por discriminación y racismo. Por su parte, Claure dijo que el presidente de la FBF debe aclarar acusaciones sobre una supuesta venta ilegal de entradas para el Mundial de 1994, y responder ante tribunales de los EEUU en un proceso penal y otro civil.
Mientras tanto, en Bolivia existen dos corrientes que vienen cuajando frentes irreconciliables que se forjan desde las Asocaciones locales y que tienen en la Asociación de Fútbol de Cochabamba su más dramático ejemplo: Dos años con una división total y una crisis institucional en una espiral sin fin.
Ambas corrientes, una que plantea un supuesto cambio y otra que se ampara en un supuesto exitoso manejo administrativo ahora parecen verse las caras en niveles macro, con dos actores que representan las dos fuerzas mayores dentro del eje actual de influencia de nuestro fútbol como lo son la empresa privada y la administración dirigencial.
Aquí salta una tercera corriente que recomienda no romper lanzas mientras esté en implementación el proceso de Xavier Azkargorta el frente de la Selección Nacional, al que ven con buenos ojos.
Sin embargo, y pese a todas las corrientes, para el ojo común y el que ve el fútbol “de afuera” esto no parece más que una pelea por el poder. Uno por prorrogarlo y otro por arrebatarlo. La pulseta sigue ¿Cuál será más fuerte?
Opiniones
CARLOS D. MESA
Historiador
Creo que este no es un buen momento para sacudir el avispero. Hay que esperar que transcurra el proceso de Carlos Chávez con el plus que tiene, que es el de haber contratado a Xavier Azkargorta como entrenador de la Selección . Creo que Azkargorta puede darnos buenos resultados y hay que esperar.
RICARDO BAJO H.
Periodista
Creo que es una cuestión de egos entre ambos, esconden una lucha por intereses particulares. Ninguno le hace bien al fútbol boliviano. Claure ya se ha metido en la comisión de la FIFA, apunta a estar arriba y ser presidente de la FBF. A Chávez le viene muy bien porque es cuestionado, y ambos disfrutan.
RENÁN LÓPEZ
Periodista
Siempre hay acusaciones que se dan. Esta parece muy delicada por el monto del que se habla. Ahora comprobar no sé si será posible. Pueden haberse cometido errores porque parece haber sido un buen negocio. Pero, si lo que buscan es la cabeza de nuestro fútbol, creo que esto los descalifica a ambos.
FERNANDO ROMANO
Periodista
Me parece que es una pelea que está destrozando al fútbol boliviano. Están destruyendo la deteriorada y paupérrima imagen de nuestro fútbol. Si estas pruebas habían hace tantos años, por qué recién ahora se están ventilando estos asuntos. Los que callaron también serían cómplices.
“Azkargorta es el plus de Chávez”
Según el expresidente Carlos Mesa -por demás reconocido por su afición futbolera- la disputa Carlos Chávez y Marcelo Claure podría no haberse planteado tan abierta y mediáticamente.
Por lo menos del lado de Claure, a quien Mesa reconoce como un gran contribuyente para el desarrollo del fútbol nacional. Mesa señala también a Chávez como un administrador de la FBF que cuenta con un plus, que es el de haber conseguido a Xavier Azkargorta como DT de la Selección Nacional. “No es un buen momento para sacudir el avispero”, señala Mesa quien entiende que ahora el proceso de la Selección comienza a encaminarse gracias al trabajo de Azkargorta y piensa que cualquier sacudida en la estructura de la FBF puede repercutir negativamente en nuestro fútbol.
La venta en el mercado negro
La supuesta venta de entradas en el mercado negro y una millonaria ganancia -un rumor de hace años- vuelve al menú y se convierte en el eje de una nueva disputa.
Carlos Chávez sostiene que Claure vendió los boletos y según algunos medios aseveró que tiene testigos que compraron en más de 1.000 dólares cada ticket. Claure negó y dijo que el paquete de 12.000 boletos dejó déficit y que solo se recuperó 800.000 dólares.
Claure el martes informó de dos juicios contra Chávez, uno en Miami y otro en tribunales bolivianos por haber dañado su imagen de empresario al denunciar que se benefició de la venta de 12.000 boletos del Mundial de 1994.
Guido Loaiza que en 1994 presidía la Federación Boliviana de Fútbol, sorprendió este miércoles en La Paz al señalar que no sabía nada de la venta de entradas en Estados Unidos.
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