Una resolución de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano (LFPB), que entrará en vigencia a partir del torneo Clausura que comienza el 13 de enero, impide que los directores técnicos dirijan a dos equipos en un solo campeonato (no temporada), lo que abolirá de hecho una práctica tradicional en el balompié nacional, cuando los entrenadores pasaban de un plantel a otro, sin mayor trámite.
Además, esta resolución obliga a la contratación de directores técnicos titulados; quienes no cuenten con este elemental requisito, no podrán actuar en ninguno de los 12 equipos afiliados a la Liga.
Esta determinación es apoyada por la Federación Nacional de Entrenadores de Fútbol de Bolivia (FNEF), pero a cambio, exige a la LFPB y la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), la firma de contratos de trabajo entre los clubes y los técnicos, con el propósito de garantizar la estabilidad de los profesionales.
“Esta resolución es importante para nuestro sector, un avance en el proceso de defensa de nuestros derechos, sin embargo, la Liga y la Federación deben exigir a los clubes la firma de contratos con los entrenadores, esto debe institucionalizarse, sólo así esta medida será beneficiosa”, aseveró Félix Berdeja, presidente de la FNEF de Bolivia.
De acuerdo a la explicación del dirigente de los técnicos nacionales, gran parte de los entrenadores que actúan en algún equipo de la Liga, no cuentan con un contrato de trabajo firmado, lo que provoca inseguridad e inestabilidad laboral.
“Ocurre que cuando los dirigentes se aburren del técnico, no están de acuerdo con su forma de trabajo o los resultados no van con sus expectativas, sencillamente lo despiden, sin más; si eso ocurre, con la nueva disposición, esa persona se quedará sin trabajo, tal vez seis meses”, advirtió Berdeja.
El dirigente de los técnicos dijo que si existe un contrato de trabajo modelo firmado entre ambas partes, los dirigentes de los clubes lo pensarán dos veces antes de despedir a un técnico, y si lo hacen, de manera automática deben cumplir con las obligaciones sociales y laborales.
“Debe ocurrir como en el caso de los jugadores, si un club no tiene arregladas las deudas con los entrenadores, no debe comenzar el siguiente campeonato”, acotó.
Berdeja señaló que en la historia del fútbol profesional boliviano, hubo varios casos en los que se pasó por encima los derechos laborales de los entrenadores, sin que se siente un precedente.
Trajo a colación lo ocurrido con Mario Rolando Ortega, director técnico de Petrolero en una parte del campeonato Apertura, que fue despedido con insultos por el presidente del club, Federico Ibarra.
APUNTE
Profesionales
La Federación de Entrenadores de Bolivia está de acuerdo con la exigencia de un título profesional para ejercer el cargo.
"Queremos la superación de nuestros afiliados, este pedido va con miras a ese objetivo", dijo Berdeja.
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