San José, uno de los equipos más humildes de la Copa Libertadores de América, recibirá hoy (21.00) en el Jesús Bermúdez de Oruro, al poderoso brasileño Corinthians, defensor del título y además último campeón mundial, en el debut de ambos en el grupo 5 del certamen continental de clubes.
En el fútbol “son 11 contra 11”, y a ese dicho se apega el santo para tratar de hacer frente a un equipo que en los papeles previos luce muy superior, y además es favorito no sólo para ganar la llave sino para pelear la opción de retener el título.
El cuadro boliviano, que pondrá en la cancha a su equipo tipo que ha estado jugando el torneo de la Liga (donde está cuarto), hará el intento para que sus argumentos futbolísticos alcancen a buscar la victoria, y a la vez tratará de poner de su lado a la altura, un aliado siempre útil, a sabiendas de que los visitantes la respetan y también le temen.
Las diferencias entre ambos son inmensas: San José tiene una formación aceptable para el medio doméstico, pero que no se puede comparar —sino en la cancha— a la lujosa plantilla que trae Corinthians, que acaba de empatar a dos con el Palmeiras en un sonado clásico de Brasil.
Un detalle que salta lo futbolístico para entrar en otro campo pinta de cuerpo entero a ambos: el puñado de jugadores de San José no debe superar el millón y medio de dólares; en cambio, según la consultora brasileña Pluri, el Corinthians está cotizado en 90 millones de dólares. Demasiado abismo entre uno y otro.
Los equipos. En el cuadro orureño se prevé, como mayor novedad, la inclusión del golero Carlos Lampe, contratado sólo para jugar la Copa Libertadores, pues en la temporada local está impedido de disputar la Liga al haber sido partícipe de la nómina de Bolívar.
El mayor énfasis ofensivo estará en tres hombres: el brasileño Gomes como asistente desde el medio sector y la flamante dupla goleadora, el recién contratado Diego Cabrera —proveniente del fútbol colombiano— para acompañar al artillero Carlos Saucedo, animado por haber llegado hace apenas unos días (el domingo contra Oriente en Santa Cruz) a los 100 tantos convertidos en torneos ligueros.
El técnico Marcos Ferrufino eligió en las prácticas nocturnas que su plantel realizó tanto el lunes como el martes, el mismo “dibujo” táctico, con tres hombres atrás para intentar dar seguridad a la zaga, dos volantes laterales que procuren subir y bajar por las bandas en la medida de las necesidades, tres volantes —uno de ellos mixtos— para rescatar y generar fútbol; y dos hombres de ofensiva, en este caso jugadores conocedores de la puntada final.
Por su parte, Corinthians —dirigido por Tité— aterrizará en el Bermúdez sólo horas antes —proveniente de Cochabamba, adonde llegó el lunes— con todas sus figuras, que incluye sobre todo a dos: Romarinho, la ecosión en Brasil, un joven descubierto no hace mucho que ya ha llenado muchas portadas gracias a su talento; y Alexandre Pato, que proveniente del fútbol italiano ha sido puesto en el equipo para formar una buena dupla ofensiva con otro peso pesado: el peruano Paulo Guerrero.
Aprestos
Un cambio
San José hará debutar en el arco, en esta su segunda ocasión como santo, al golero Carlos Lampe, contratado sólo para la Copa Libertadores.
Trabajo
El plantel orureño tuvo dos sesiones nocturnas en el estadio Jesús Bermúdez: el lunes y ayer probó el equipo con el que jugará hoy.
Visitante
Corinthians llegó a Bolivia el lunes, lo hizo a Cochabamba, donde ayer practicó en el Félix Capriles. Hoy, horas antes, irá a Oruro.
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