Un partido con poca trascendencia disputarán esta tarde (16.00) Aurora y The Strongest en el estadio Félix Capriles de Cochabamba, la revancha del que hace unos días —el domingo— protagonizaron en La Paz con victoria para el cuadro valluno (1-2).
Fue Aurora, con ese triunfo en el Hernando Siles, el equipo que empujó al Tigre al precipicio, quitándole la chance de pelear por alguno de los tres primeros lugares del Clausura, negándole así la posibilidad de alcanzar algún premio internacional.
Por eso el encuentro de hoy, reprogramado de la undécima jornada, tiene escasa trascendencia, sólo la que le quieren dar ambos conjuntos, la de procurar acabar este certamen lo más arriba posible, sobre todo el Tigre, que después de haber sido campeón tres veces seguidas considera que su lugar no está en la parte baja de la tabla, sino todo lo contrario.
Según el técnico Eduardo Villegas, The Strongest tiene que pelear hasta el final en los siete partidos que le quedan, dos más que a la mayoría, justamente los que tuvo que reprogramar —como el de hoy— para atender su participación en la Copa Libertadores.
Mientras Aurora —dirigido por el exfutbolista Víctor Hugo Antelo— prevé poner el mismo equipo que ganó hace unos días, The Strongest hará algunos cambios: volverá a la zaga Luis Méndez tras cumplir un partido de suspensión por amarillas; Marcos Paz irá al medio donde no estará el expulsado Wálter Veizaga; el costarricense Kenny Cunningham será el hombre que mueva los hilos en la mitad de la cancha y Luis Melgar será titular en el ataque.
Soliz sigue con baja médica
Apenado por la cirugía a la que fue sometido y por el momento que atraviesa el equipo en la Liga, ayer el volante Nelvin Soliz anticipó su deseo de volver lo antes posible, sea ante Petrolero o La Paz FC. El mediocampista fue operado el viernes de un quiste en uno de sus pómulos, lo que inicialmente lo deja fuera del trabajo de 10 a 12 días.
Con una venda que cubre parte de su rostro, unas gafas negras y una gorra para protegerse del sol, el futbolista pasó ayer por un control médico y contó que aún tiene reposo en casa, para no exponer la herida.
“A ningún jugador le gusta verse así, como si estuviese lesionado y más cuando pienso que el grupo necesita de todos para salir de este mal momento, ojalá que me recupere antes y así juegue a mediados de mayo, sea con Petrolero o La Paz”. Soliz admitió que no le queda otra opción que ser paciente, reposar y alimentarse bien. El futbolista quiere acabar el actual torneo jugando y no parado, sin poder aportar con fútbol a su plantel.
Ayer, en Achumani, trascendió la posibilidad de que viaje a su natal Tarija para estar unos días junto con su familia, sin embargo todavía no ha recibido el visto bueno del técnico Villegas. El mediocampista aseguró que está dolido más por el bajón anímico que atraviesa el equipo que por la cirugía que le practicaron y por eso espera que el Tigre supere el mal momento futbolístico.
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