En La Paz se disputaron más encuentros del Clausura
En el Clausura 2012-2013 de la Liga se han jugado 132 partidos, de los cuales 33 se desarrollaron en La Paz (estadios Hernando Siles, Rafael Mendoza y Los Andes de El Alto), 22 en Santa Cruz (dos de ellos en Montero), 22 en Cochabamba, 22 en Potosí y a 11 cotejos en las ciudades de Oruro, Sucre y Villamontes.
Hubo más goles en los segundos tiempos
En el certamen fueron anotados 403 goles, a un promedio de 3.05 por partido. De esas conquistas 160 fueron convertidas en los primeros tiempos y 243 en las etapas complementarias.
Wilster y la ‘U’ sufrieron más expulsiones
Según nuestro cómputo extraoficial, fueron expulsados 82 jugadores y dos equipos sufrieron mayor cantidad de sanciones: Wilstermann y Universitario, cada uno con 10; luego Aurora, Nacional Potosí y Bolívar (9); La Paz FC (8), The Strongest y Petrolero (7), Oriente y Real Potosí (4), Blooming (3) y San José (2).
Alejandro Mancilla y Maldonado dirigieron más
En total 22 árbitros fueron designados para dirigir los partidos del torneo Clausura. Dos de ellos tuvieron mayor actividad: Óscar Maldonado y Alejandro Mancilla, cada uno pitó 17 encuentros.
En cambio, estuvieron a cargo de solamente un juego de este certamen: Rubén Choque, Milton González, Vladimir Canaviri y Carlos García.
El resultado más común fue el 2-1, se registró en 22 ocasiones
El resultado más repetido fue el 2-1 que se dio en 22 cotejos, seguido por el 1-1 en 19. Nueve partidos acabaron sin apertura de la cuenta y sólo una vez se registraron marcadores como los siguientes: 4-2, 4-3, 5-1, 5-3, 6-0, 6-2 y 7-0. No hubo, por ejemplo, partidos empatados a tres ni cuatro goles.
Ferreira y Fierro igualan en el primer lugar goleador
William Ferreira, de Bolívar, y Juan Eduardo Fierro, de Universitario, empataron en el primer lugar de la tabla de goleadores, cada uno con 17 tantos. Para recordar: el celeste hizo una tripleta ante Wilstermann y el jugador de la “U” le marcó cuatro a The Strongest.
Carando también hizo cuatro en un mismo encuentro
Otro jugador que anotó cuatro goles en un partido fue Danilo Carando de Oriente, que le ganó a Wilstermann 6-2. En tanto que Diego Ardaya, de Nacional Potosí; Juan Carlos Arce, de Bolívar, y Lucas Defranceso, de Wilster, marcaron de a tres ante Petrolero y los dos últimos contra La Paz FC, respectivamente.
Oriente vs. Wilstermann tuvo más goles (ocho)
El compromiso con mayor cantidad de goles (ocho en total) fue el que jugaron el domingo 19 de mayo, por la vigésimo primera fecha, los equipos de Oriente Petrolero y Wilstermann, que concluyó con el resultado favorable al albiverde por 6-2.
Oriente logró una racha de 11 partidos sin conocer la derrota
Oriente Petrolero consiguió una racha de 11 partidos sin conocer la derrota, seguido por Bolívar, que en diez cotejos no supo de caídas.
En la otra cara de la moneda aparecen Petrolero y La Paz Fútbol Club (éste último en dos etapas diferentes) que acumularon cinco derrotas consecutivas.
En defensa de la historia
Por CARLOS D. DE MESA GISBERT
Marcas Plus de La Razón ha publicado un interesante editorial en su edición Nº 68, en el que hace una serie de consideraciones a propósito de mi tesis de no cortar como un queque la historia del fútbol profesional boliviano.
Como es de todos conocido esa historia tiene tres etapas: La primera de 1950 a 1959, la segunda de 1960 a 1976, y la tercera de 1977 hasta hoy. Esas etapas, sin embargo, son sólo referenciales. La competitividad del fútbol anterior a 1977 está fuera de duda. Baste citar las muy buenas actuaciones internacionales en la Libertadores de equipos como Wilstermann (1961), The Strongest (1965), Bolívar (1969), Oriente Petrolero (1972) y Wilstermann (1973). En 1961 y 1969 aviadores y celestes no clasificaron a la siguiente fase por una moneda y por un partido de desempate.
El argumento de que Santa Cruz no entró al profesionalismo sino hasta 1965, colocaría en entredicho la lógica que usan todos los países de América Latina, que hacen el recuento de sus títulos desde el comienzo del profesionalismo. El caso más elocuente es el de Argentina que hasta bien avanzado el siglo XX tenía en su fútbol profesional (que comenzó en 1931) un dominio casi monopólico de equipos de Buenos Aires. Nadie pone en cuestión en ese país los títulos anteriores a los campeonatos verdaderamente nacionales que se organizaron varias décadas después de los años 30 del siglo pasado, por el hecho de que los porteños eran “dueños y señores del fútbol profesional” durante años y años.
El otro argumento indica que haciendo el recuento total de títulos, Bolívar “de esa forma se mantendrá de lejos como el más ganador”. Tal precisión no es correcta. Veamos la comparación de los títulos logrados por los equipos que actualmente militan en la Liga:
Como puede apreciarse, en el caso de todo el profesionalismo la brecha mayor es de 22 títulos y la menor de 11. En el caso de la Liga la brecha mayor es de 17 títulos y la menor es de 8. En suma, en cualquier comparación la diferencia a favor de Bolívar es abrumadora. Si sacamos el total en porcentaje de títulos obtenidos en función del número de torneos disputados, esos porcentajes son bastante parecidos, pero obviamente a Bolívar le va mejor si contamos sólo los torneos ligueros que si contamos el total, como ocurre con todos los demás equipos. En consecuencia, la diferencia porcentual es casi la misma en ambos casos.
En conclusión, creo que es injusto no contar todo el profesionalismo, ya que la diferencia entre Bolívar y el resto de los clubes es tan grande que en cualquier comparación la brecha es simplemente abismal, con lo que el argumento de buscar un mayor equilibrio no se cumple.
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