Recurrieron a ellos Blooming, Bolívar y Oriente Los juveniles son la tabla de salvación en conflictos

No es la primera vez y tampoco será la última que, un club de Liga Profesional recurra a su división juvenil para jugar el torneo o alguna parte, tal como ocurre con Oriente Petrolero en el actual Apertura 2013.

Antes ya lo hicieron, el propio equipo albiverde, Blooming y Bolívar tras conflictos que se presentaron entre dirigentes y plantilla profesional como también por exigencias de compromisos internacionales.

Blooming dos veces. El primer equipo que tuvo que recurrir a su plantilla juvenil fue Blooming en el primer torneo del año 2000.

Los títulos de 1998 y 1999, le pasó factura a la dirigencia que, no pudo sostener la exigencia de los jugadores que decidieron un paro teniendo como respuesta el marginamiento de casi todo el plantel profesional.

Milton Melgar, entonces entrenador, tuvo que convocar un equipo reserva con el apoyo de Napoleón Cardozo que los entrenaba.

Jugó cuatro partidos (y los perdió todos) ante Mariscal Braun, Real Santa Cruz, Guabirá y Bolívar.

En 2002 se repitió la historia ya que los jugadores exigían su pago pero fueron despedidos y llamados la división juvenil.
José Luis Brown que era el entrenador, no aceptó seguir dirigiendo por lo que terminó asumiendo Cesar Soto, que era el entrenador de las divisiones menores.

Jugó seis partidos y uno (ante Mariscal Braun), fue suspendido, perdiendo cuatro y ganando los otros dos ante Guabirá y The Strongest.

Bolívar. Dos años después, 2004, el turno fue de Bolívar.

La causa no fue motivos económicos sino de compromisos por la Copa Sudamericana. Recuérdese que en una de sus mejores actuaciones internacionales, los celestes llegaron hasta la final ante Boca Junior de Argentina ante el ganaron en La Paz 1-0 y perdieron en Buenos Aires 0-2.

Ante la acumulación de sus compromisos de Liga decidieron terminar el torneo con un equipo juvenil al mando de Francisco Sandóval jugando incluso partidos cada dos días.

Fueron siete de los que ganó dos, empató uno y perdió cuatro.

También Oriente. En 2010 bajo el mano de Gustavo Quinteros, que después terminó ganando el título del Clausura, Oriente Petrolero pasó por un momento similar al de los celestes.

El equipo albiverde jugaba la Copa Sudamericana y como sus compromisos de Liga no se podían postergar más, Quinteros opto por cumplir dos partidos (ante Wilstermann y Bolívar) con equipo juvenil entregando el mando a Johnny Justiniano, perdiendo los dos.

La de 2013, es diferente porque esta vez la causa es la falta de pago y la contraofensiva dirigencia.