El Campeonato Sudamericano de 1963, recordado por todos como uno de los torneos más importantes en la historia del fútbol boliviano por el título invictó que logró la selección nacional, fue histórico también para Jesús Quiroz, quien con sus propias manos creó el balón oficial para la cita internacional.
“La emoción invadió todo mi cuerpo cuando me dijeron que mi balón, un producto nacional, iba a ser la pelota oficial del Sudamericano de 1963”, recuerda Quiroz.
La curiosidad, los ánimos de superación y sobre todo el afecto por el deporte llevaron al exfutbolista y exbasquetbolista, a fundar la empresa de balones Litoral, los cuales rodaron por canchas nacionales e internacionales.
Y es que Litoral fue la primera empresa cochabambina que creó un balón que cumplía con todas las normas FIFA.
La Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y la Confederación Sudamericana del balompié fueron las entidades que sometieron al balón Litoral a una serie de estudios. Mismos que dieron como resultado un balón con peso y tamaño reglamentario, apto para una competencia de orden internacional.
La empresa nació gracias al esfuerzo de Quiroz quien junto a su cuñado Juan Mercado, en 1958 (específicamente un 23 de marzo), bautizaron a los balones con el nombre que hoy es una tradición. “Esa siempre fue mi afición. Desde pequeño comencé arreglando las pelotas del barrio y poco a poco afiné el trabajo”, cuenta Quiroz.
Quiroz recuerda también que empezó con técnicas rudimentarias, antiguas y manuales. “Me acuerdo que trabajábamos con moldes de papel, utilizábamos un punzón y las pelotas nos salían medio ovaladas”, dice sonriendo.
Entonces, Quiroz asegura que creó moldes de fierro y distintas máquinas como las tensoras, perforadoras, prensas para el costurado y otras que lo ayudaron a perfeccionar el trabajo. Esto ayudó a realizar la tarea con mayor rapidez y calidad.
“Mi propósito era hacer una pelota nacional que compita con el resto de las pelotas extranjeras que llegaban al país”, indica visiblemente emocionado.
Con el pasar de los años y tras el gran éxito de los balones en el Sudamericano, Quiroz junto a un equipo de operarios empezaron a fabricar cada vez más balones. Llegaron a cumplir pedidos para distintos clubes en todo el país e incluso en países como Perú y Argentina desde donde solicitaban el producto denominado hasta ahora como “el balón de los campeones”.
Litoral es el balón oficial de múltiples competencias
Desde 1963, “el balón de los campeones” se ha convertido en la pelota oficial para competencias nacionales e incluso campeonatos de barrio. Gran parte de los deportistas y aficionados practican disciplinas como voleibol, fútbol de salón, fútbol y otros con Litoral.
Con el pasar de los años, Litoral llegó a formar parte de una tradición en el deporte boliviano por los materiales que se emplean para su fabricación, que son de primera calidad.
Fuente de empleo para los privados de libertad
La empresa Litoral actualmente trabaja con cuatro operarios, sin embargo existe un nutrido grupo de trabajadores compuesto por internos de centros penitenciarios de nuestro medio.
Internos de los centros penitenciarios San Pablo de Quillacollo y San Antonio de Cercado periódicamente forman parte del personasl de apoyo a la empresa de balones.
“Mi objetivo también es ayudar a las personas y darles una fuente de trabajo” indica Jesús Quiroz.
La familia Quiroz busca una nueva iniciativa
La familia Quiroz se ha planteado el objetivo de generar conocimiento en la población. Las nuevas generaciones pretenden abrir las puertas de su empresa para enseñar a fabricar balones a los interesados.
“Esta es una nueva iniciativa para que muchas personas sepan cómo fabricar un balón”, dice Quiroz.
“Si queremos un país desarrollado, debemos construirlo. Principalmente valorando lo que nuestros hermanos bolivianos construyen”, comenta el fundador de Litoral.
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