El Consejo Superior de la Liga, que se reunirá el martes en Sucre, definirá si mantiene el proyecto de subir el número de equipos en sus torneos de 12 a 14, o lo aborta, después de que la Asociación Nacional de Fútbol (ANF) descartara un ascenso inmediato de dos de sus afiliados.
La ANF se reunió el jueves, en la misma ciudad, y volvió a negarse a organizar un campeonato relámpago para promover a dos equipos a la máxima categoría, amparándose en que eso debe darse, según norma de la FIFA, por mérito deportivo mediante un proceso, por tanto sugirió a la Liga que el cambio surja para la temporada 2015-2016.
El presidente liguero, Jorge Decormis, declaró ayer que la posición de la ANF “será analizada por los presidentes” de clubes, aunque admitió que sin el apoyo de las asociaciones va a ser difícil que haya un incremento inmediato.
“Este no es un proyecto de ahora, viene de antes. La idea es cambiar, mejorar las condiciones del fútbol boliviano. Que hayan más clubes y, por tanto, más jugadores. Lamento que no exista apoyo (de parte de la ANF) para implementarlo”, dijo.
Aunque la Liga es autónoma, descartó que para subir el número de equipos extienda invitaciones directas, “porque eso sería salirse de la norma, aunque la palabra oficial surgirá en la reunión” del martes en la Capital. “La Liga respeta la norma, debe primar el mérito deportivo. Por tanto, no habrá invitaciones directas, eso no vamos a hacer”.
En una conversación con el programa radial El Panamericano Deportivo, Decormis dio a entender que hay clubes que no solo quieren que sean 14 equipos, habló incluso de 16. “Es importante para el fútbol boliviano contar con más clubes para que surjan de esa manera nuevos valores y tengan mayores oportunidades para jugar”.
Los recién descendidos, el montereño Guabirá y el valluno Aurora, tenían la intención de participar en un cuadrangular contra equipos de asociación y, por esa vía, regresar de inmediato a la Liga. Pero la ANF no dio curso a ese campeonato.
Si se mantiene la decisión, ambos deberán regresar a competir en sus asociaciones, sin embargo —sin importar cómo les vaya a nivel local—, desde ya tienen un lugar asegurado en el próximo Nacional B para buscar el ascenso, gracias a una norma de la propia Asociación Nacional de Fútbol que —vulnerando el mérito deportivo que ahora decidió respetar—, desde hace unas temporadas permite que en ese certamen jueguen los recién descendidos de la Liga.
Según Decormis, los clubes deberán decidir qué hacer con el proyecto, con la probabilidad de dejarlo sin efecto, es decir que si no se dan los ascensos ahora, tampoco se producirán después.
El dato
Reunión
La Liga convocó a reunión de Consejo Superior para el martes. Los 12 clubes, incluidos los dos nuevos (Universitario de Pando y Petrolero de Yacuiba) ya fueron alertados. Ahí se conocerá la posición final.
Solo dos clubes están al día
Solo dos clubes, el campeón Universitario de Sucre y Bolívar, están al día con sus jugadores por concepto de contratos hasta la temporada pasada, los demás aún tienen deudas. Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol) advirtió que si los deudores no arreglan con los futbolistas, exigirán aplicar la norma de impedir jugar al club que todavía debe, y si la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) no la hace efectiva, habrá un paro de jugadores que impedirá el inicio del torneo Apertura.
El presidente de la Liga, Jorge Decormis, dijo ayer que “todo pasa por la buena fe de los clubes y nosotros esperamos que éstos cumplan con sus jugadores para que no se perjudique el desarrollo del campeonato”.
El dirigente de Fabol, el exfutbolista David Paniagua, informó esta semana que hay diversas denuncias de jugadores por impago de parte de los clubes, salvo de la “U” que obtuvo el título del Clausura y Bolívar. “Todos los demás están en problemas”.
Según indicó —sin dar detalles de los clubes—, en algunos casos hay temas que se pueden solucionar, de hecho los dirigentes están mostrando su predisposición, pero hay otros que están complicados. “Nuestra obligación como Fabol es la de hacer cumplir la norma”.
Decormis espera que no se llegue a interrumpir el inicio del torneo por este motivo, “pero es un asunto que lo deben arreglar los dirigentes de los clubes. Insisto en que nosotros confiamos en la buena fe de ellos”. Admitió que, a fin de darles más tiempo, es probable que la temporada 2014-2015 comience una semana después de lo inicialmente acordado, es decir el 16 y 17 de agosto y no el 9 y 10.
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