En una carta enviada al presidente del Estado Plurinacional, Evo Morales Ayma, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) le hace conocer su “profunda preocupación” por la “indebida injerencia que estaría cometiendo un senador electo del Movimiento Al Socialismo (MAS), en asuntos que son de competencia exclusiva” de los dirigentes del fútbol. La carta a la que tuvo acceso Marcas está fechada en Santa Cruz, el 25 de noviembre pasado.
“Sabemos que está informado acerca de lo sucedido el pasado 1 de septiembre, cuando se realizaba nuestro cuadragésimo sexto Congreso Ordinario en la ciudad de Trinidad, departamento del Beni, y fuimos violentamente desalojados y gasificados por efectivos policiales so pretexto de la existencia de una bomba en el recinto en el que nos encontrábamos, acción injustificada que no pudo impedir el acto eleccionario en el que fui reelecto por segunda vez con más de dos tercios de votos —23 de 28—, y que nos vimos forzados a realizar en la plazuela Doris Natusch, expulsados por efectivos de la UTOP que finalmente no encontraron artefacto explosivo alguno en el recinto”.
La carta está firmada por el presidente de la FBF, Carlos Chávez, quien asegura que los dirigentes cuentan “con todas las pruebas de cuáles fueron los móviles y quiénes fueron los responsables de tan temeraria e injustificada acción”.
Califica de “voces insidiosas y amenazantes” las que pretenden generar malestar y confusión “como la del ya mencionado senador que asumirá su cargo en enero de 2015 y que estaría en la pretensión de capturar el manejo del fútbol a través de operadores políticos infiltrados en la dirigencia de algunos clubes, con la complicidad y coordinación de algún antiguo presidente de club, que acaban de sentar un funesto precedente el pasado 10 de noviembre en la ciudad de Potosí, realizando elecciones de la Liga, al margen de los procedimientos y vulnerando la normativa con la que se rige institucionalmente el fútbol boliviano, al más puro estilo de los golpes de Estado”.
Además le hace saber que el gobernador de La Paz, César Cocarico, “ha anunciado la realización de un torneo internacional Sub-16 sin que haya hecho conocer esta idea a la Asociación de Fútbol de La Paz (AFLP), y a través de ésta a la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), que de acuerdo a normas estipuladas por la Confederación Sudamericana (Conmebol), necesita del debido permiso y coordinación para llevarse a efecto, ya que toda competencia internacional, por más amistosa y no oficial que sea, debe ser registrada y autorizada por el ente máximo”.
Todas esas acciones “vulneran el respeto irrestricto a la convivencia democrática”. Además, avisa que la FIFA y la Conmebol observan con preocupación estos movimientos atentatorios contra el normal funcionamiento institucional del fútbol”.
Los datos
¿Quién es?
Hechas las averiguaciones, cuando la FBF se refiere a “un senador electo” se trata del exministro de Gobierno Carlos Romero, muy ligado además a Bolívar, integrante del directorio celeste.
¿Loayza?
En la carta acusa a “operadores políticos infiltrados” y “a algún antiguo presidente de club”. Solo Bolívar tiene un presidente desde hace varios años, Guido Loayza.
Disposición
“Siempre dispuesto a trabajar con usted en busca de mejores días para nuestro fútbol”, le dice Chávez a Morales.
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