Debido a su cargo de delegado de la Conmebol, estuvo en el ‘ojo de la tormenta’ en el partido de revancha de la Copa Libertadores entre Boca y River Plate, que terminó siendo suspendido por la agresión a los jugadores millonarios.
Estuvo junto al árbitro cuando este decidió terminar el partido y dejar que sea la Unidad de Disciplina de la Conmebol la que decidiera quién pasaba de fase y la sanción para los xeneizes.
No hace caso a las críticas del secretario de Seguridad de Buenos Aires, Sergio Berni, de quien dice que no sabe nada de fútbol y menos de sus reglas. Revela que la idea, en todo momento, era que el partido continuara, pero que el árbitro decidió acabarlo.
No ve cómo lo sucedido en el estadio la Bombonera pueda afectar su carrera en la Confederación Sudamericana de Fútbol, ya que todo lo que tenía que hacer o decir está en el informe confidencial que envió esa misma noche.
¿El secretario de Seguridad Sergio Berni, intentó deslindar cualquier responsabilidad en lo sucedido en la Bombonera?
No es responsabilidad de nadie, simplemente el partido fue suspendido por el árbitro y nada más.
Calificó su actuación de negligente...
Ese no entiende de fútbol. Qué tiene que ver con el fútbol. Para qué le voy a dar ‘bola’ (importancia) Este tipo estaba asustado, no sabía para donde prender. Esas personas son políticas, que aparecen en el estadio porque hay elecciones.
¿No amerita una respuesta?
Yo no le voy a contestar porque yo no manejo a la prensa como él, que fue a los medios. Es una persona que no sabe de fútbol. Las normas del fútbol son diferentes a las de la política.
¿En este tipo de situaciones quién tiene toda la autoridad?
El árbitro es la máxima autoridad del partido. Él es quien decide si el juego se inicia o se paraliza. Yo soy todo lo que es tribuna, ingreso y espectáculo. Quien dice cuándo el partido se inicia y se termina es el árbitro. Yo soy la autoridad de la Conmebol y él es del partido.
La demora en tomar una decisión para suspender el partido, ¿a quién se la puede atribuir?
No hay tiempo para determinar eso. Los tiempos de espera los manejan los árbitros. En Río me tiré más de hora y media esperando que se prenda un motor. La gente que no sabe nada de fútbol especula y habla para crear protagonismo donde no hay.
¿El primer tiempo fue normal o hubo algo que hacía predecir este tipo de desenlace?
Todo era normal. Todo sucedió al comenzar el segundo tiempo cuando los equipos se estaban queriendo acomodar para comenzar el segundo tiempo y ahí fue donde cometen esa agresión a los de River.
Lo que pasó en la Bombonera, ¿puede ser calificado como un atentado?
No, nada que ver, pero seguro que repercute internacionalmente mucho y más aún tratándose de un partido de esta naturaleza.
¿No hubo síntomas que indiquen que algo estaba mal?
No, nada indicaba que algo podía pasar en la cancha. Todo se hizo bien, la Policía operó bien, y como dijo el presidente de Boca (Daniel Angelici), un inadaptado tiró por la borda todo lo bueno que se había realizado hasta el momento por todos, para que el espectáculo se desarrollara sin problemas.
¿Este hecho, repercute de alguna manera en contra de su cargo dentro de la Conmebol?
No tiene por qué afectarme en la carrera que pretendo hacer dentro de la Conmebol. No debería afectarme en nada, si yo no hice nada, yo no tire el gas. Yo solo fui una autoridad que coadyuvé con el árbitro en una situación complicada como la que sucedió.
De todas formas se trató de una situación muy complicada y sobre todo tensa...
Son situaciones que hay que saber manejarlas dentro de la cancha, como la manejó el árbitro (Daniel Herrera), que esperó su momento y de ahí decidió que no se podía seguir y lo comunicó a los dos capitanes a quienes llamó para comunicarles su determinación.
¿Cuál fue su papel en ese momento dentro de la cancha?
Como siempre, ver que desde el inicio esté todo normal, que las condiciones estén dadas para el partido y así fue. Al final yo hice mi informe y el árbitro hizo el suyo, ambos enviamos los documentos, vía correo electrónico a la Unidad Disciplinaria, que es la que debe decidir qué va a pasar.
¿Para hacer ese informe esperan estar fuera del estadio o tiene que ser en ese momento?
Tiene que ser ese rato y se lo envía a la Conmebol para que esta actúe, como que ya lo hizo al notificar a Boca Juniors.
¿Qué tan confidencial es el informe que hizo?
Lo máximo. Nadie lo puede ver, menos leer. Yo lo hago y envío el material a la unidad de disciplina y ellos procesan la información.
¿Llegó a pensar que se podía poner más fea la situación?
No. Había dos opciones. Una era esperar a que los jugadores de River mejoren y se reinicie el partido y la otra alternativa es que directamente se lo suspenda.
¿En ese momento usted estaba en la cancha?
Sí, claro, yo estaba conversando con el árbitro principal. De pronto el cuarto juez se acerca a llamar a los jugadores para reiniciar el partido y fue ahí cuando se dio cuenta de lo que había pasado, ya que los jugadores estaban en el piso y con muestras de ardor.
¿Temió que le pase algo?
No, no te puede pasar nada, ya que tenés la protección de la Policía, dentro y fuera de la cancha, así que no había nada que temer. Uno está resguardado.
¿Cómo fue el trabajo con el árbitro en ese momento?
Trabajamos de manera coordinada. Todo estuvo bien. En ese momento fuimos a ver a los jugadores y él le dijo al técnico de River (Marcelo Gallardo) que trate de recuperar a sus jugadores, ya que la idea era continuar el partido siempre y cuando las condiciones estén dadas.
¿Porque la prioridad estaba centrada en que se jugara?
Siempre. Siempre el árbitro quiso que se continúe con el partido, aunque, claro, eso dependía de la evolución y mejoría de los jugadores de River. No tenía que haber ningún riesgo para que estos regresen a la cancha.
¿Estaban dadas las condiciones de seguridad para que se hubiera continuado jugando?
Si los jugadores de River se hubieran recuperado creo que sí. Pero no fue así y el árbitro decidió que no iba más y por ello se suspendió. La Policía tenía todo bajo control y por eso no había qué temer.
Había mucha tensión en jugadores y técnicos de cada uno de los equipos, ¿lo presionaron de alguna manera?
Cada uno jugando su papel en la cancha. Nosotros nos manteníamos al margen de todo, ya que al final de cuentas es entre jugadores y técnicos. Siempre hay presión de una y otra parte, ya que no hay que olvidarse de que cada uno juega con su interés.
¿Cuántos eran los jugadores que estaban delicados?
Si bien el gas afectó a cuatro jugadores, eran solo dos los que estaban bien mal y a quienes no había cómo recuperarlos inmediatamente para seguir jugando, por eso se determinó parar el partido.
¿Es la primera vez que le toca una situación como esta?
Ya había tenido partidos complicados donde se agarraron a puñetes entre paraguayos y brasileños, en Río de Janeiro, y otra vez en Chile. Pero esta forma de agresión a los jugadores creo que es la primera vez que me pasa.
¿Y la sanción?
La Conmebol tiene sus normas y estatutos y son verticales con sus normas y las hacen cumplir.
¿Dónde termina su función como delegado de la Conmebol?
Apenas se termina el partido elaboro mi informe. En ese instante se acaba mi trabajo.
¿Esta vez le tocó salir escoltado por la Policía?
Siempre nos escoltan. Lo hacen bien y además estamos hospedados en el mismo hotel junto a los jueces del partido. Anoche (el jueves) salí tarde junto a los árbitros y nos fuimos directo a nuestras habitaciones.
¿Es una experiencia más dentro de su vida como dirigente del fútbol?
Es una más dentro de las muchas que me ha tocado vivir cuando he viajado como delegado.
¿Se lo puede considerar como un hecho aislado?
Sí, es un hecho aislado dentro de lo que es el fútbol. Todo se lo hizo bien, lastimosamente un sujeto cambio la historia.
¿Se tiene determinado el origen de toda la agresión?
Las cámaras han mostrado cómo sucedió todo. La Policía y el Ministerio Público ya han tomado cartas en el asunto y ahora hay que esperar que todo siga su curso para sacar conclusiones.
Se habló de que la agresión vino desde adentro de la manga de seguridad ¿qué hay de eso?
Nada. Las imágenes muestran a un hombre al otro lado de la manga de seguridad, por el lado de afuera (incluso se ve cómo intentan abrir la malla), aunque serán las investigaciones las que determinen lo que realmente pasó esa noche
No hay comentarios.:
Publicar un comentario