Por ahora no puede hablar, pero por lo que se conoció de gente de su entorno, Alberto Lozada está dispuesto a renunciar a su cargo de secretario ejecutivo de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), entidad a la cual tiene prohibido acercarse o tener contacto con la gente que trabaja en el lugar.
De acá en más, será difícil que Lozada vuelva a dar declaraciones públicas, ya que todo lo que diga puede ser usado en su contra durante la investigación que le sigue el Ministerio Público por varios delitos. Sin embargo, en Sucre donde estaba aprehendido en la Felcc ‘Tico’ manifestó que “no se aferra al cargo”.
Hoy por hoy, el dirigente está dispuesto a dar un paso al costado, aunque eso debe decidirlo un nuevo comité ejecutivo, que es quien pone al secretario ejecutivo. Para ello se tiene que hacer un congreso de la FBF para definir la situación de Carlos Chávez, que está detenido preventivamente en el penal de Palmasola, y luego llamar a elecciones.
En agosto de 2013, Lozada se convirtió de gerente a secretario ejecutivo, un nuevo cargo que implementó la Conmebol en su seno y que también determinó que haya en las asociaciones miembros.
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