La otra firma puede ser de Jorge Justiniano, segundo vicepresidente de la FBF, o de Pedro Zambrano, secretario general. El inconveniente es que están aprehendidos en Sucre, a la espera de que hoy un juez cautelar defina su suerte. Estas medidas pueden ser libertad irrestricta, preso o medidas sustitutivas a la detención.
Ambos son cercanos a Carlos Chávez y han trabajado bastante con el dirigente, por lo que la Liga tendría que negociar con uno de ellos para conseguir la firma que falta para que se adelante el congreso extraordinario, que puede ser llamado con un plazo no menor a siete días. Esa es la única manera, que el fútbol boliviano cuente con un titular que pueda cumplir las funciones de las que está impedido Carlos Chávez. Por este motivo Bolivia no tendrá representante en el sorteo de las eliminatorias, que se desarrollará mañana en Rusia.
Además, por el momento no hay quien defina la continuidad del entrenador Mauricio Soria al mando de la selección boliviana. Hace 11 días se informó de que se iba a rescindir contrato, pero nada de ello pasó pues el encargado de negociar, el secretario ejecutivo de la FBF, Alberto Lozada, tiene arresto domiciliario y arraigo. En el congreso extraordinario se debe decidir qué pasará con los cargos que han quedado sin mando en el comité ejecutivo: segundo vicepresidente y secretario general; además del puesto de secretario ejecutivo.
Una reunión clave
El consejo superior, que se realizará hoy, desde las 10:00, en las oficinas de la Liga en Santa Cruz, será uno de los más importantes de los últimos años. Según el secretario general de los ligueros, Hormando Vaca Díez, es un hecho que se cambiará el orden del día, que un primer momento tenía como tema principal el fixture del próximo torneo. “Se puede cambiar para tratar el momento que vive la FBF”, dijo
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