Hay nombres, pero no candidatos

A poco más de un mes para la elección del presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) en un congreso ordinario convocado para el 22 de enero en Tarija, han comenzado a surgir nombres de dirigentes para terciar en los comicios, aunque ninguno ya es candidato.

César Salinas, presidente de The Strongest y Miguel Ángel Antelo, expresidente de Oriente Petrolero, fueron sugeridos por sus clubes, pero falta que ellos se pronuncien. Por su parte, Carlos Romero, titular de Sport Boys, dijo que no ve como prioridad en este momento postularse.

Las veces que fue consultado sobre si tiene interés de ser presidente de la FBF, Salinas respondió que no; sin embargo su club lo quiere postular y trata de convencerlo. El dirigente estuvo esta semana en Argentina atendiendo asuntos particulares.

Tanto César Salinas como Miguel Ángel Antelo cumplen con los requisitos que exige el Estatuto Orgánico de la FBF para ser candidato a la presidencia. Por ejemplo: “Ejercer o haber ejercido la dirigencia por un periodo no menor a cuatro años, continuos o discontinuos”. En cambio, Romero todavía no salvó este acápite, pues el año pasado fue presentado por Bolívar como miembro de su Comité de Fútbol y en esta gestión asumió como titular del club de Warnes.

El presidente de Oriente Petrolero, Ernesto Álvarez, lanzó a la arena electoral a Antelo, de quien dijo que es la persona ideal para solucionar la crisis y conducir los destinos del balompié nacional.

Antelo regresó a Bolivia luego de un prolongado viaje al exterior y señaló que no es momento para hablar del tema porque considera necesario conversar con su club. “Tengo que hablar con los dirigentes de mi club antes de emitir un criterio. Desde que renuncié en 2013 no hice ninguna declaración sobre temas futbolísticos y sobre una candidatura no puedo anticipar nada”, señaló.

“Los actuales dirigentes deben ponerse la misma camiseta para tomar buenas decisiones. Deben dejar de lado posiciones personales y regionales y sentarse en una mesa para hablar de las necesidades y las soluciones. El aporte de todos es importante”, agregó Antelo. Salinas emitirá una declaración en las próximas horas; sin embargo, el dirigente atigrado Freddy Téllez, quien además es vicepresidente de la Liga, insistió en que su club va a proponerlo como candidato.

Romero ingresó con todo este año a la actividad dirigencial y señaló que su prioridad es poner en orden la actividad institucional de Sport Boys, relegando a plano secundario otra actividad en el fútbol. Hace unos días declaró al programa de radio Solo Fútbol de Santa Cruz acerca de la posibilidad de presentar su candidatura, pero ayer aclaró que fue en un acto de reacción por defender a su club.

“Veo tantas injusticias y actitudes que contradicen con una proyección del fútbol y uno en su impotencia se siente con ganas de cumplir con otro rol. Pero hay muchos factores que debo considerar, como los de orden político y el aspecto institucional de Sport Boys al cual creo que le están haciendo mucho daño”, destacó Romero, quien también es ministro de Gobierno. En todo caso, aclaró que el hecho de que sea ministro de Estado no significa mezclar la actividad política con su cargo en el ámbito deportivo.

Registro, hasta cinco días antes

Postulación

Los candidatos a la presidencia de la FBF deben presentar sus postulaciones de manera oficial hasta cinco días antes de la fecha fijada para las elecciones. Al margen de los requisitos establecidos de condición de dirigente debe adjuntar a su registro una certificación de no tener sentencia penal ejecutoriada.

Renuncia

Durante el ejercicio de la presidencia de la FBF el elegido no podrá ser presidente de club de Liga o asociaciones, por tanto si Salinas es votado deberá renunciar a The Strongest.

Comité

El congreso ordinario solo elige presidente, los otros cuatro cargos son nominados por la Liga (primer vicepresidente y tesorero) y la Asociación Nacional de Fútbol (segunda vicepresidencia y secretaría general) de acuerdo con sus estatutos.

El nuevo presidente dirigirá hasta 2018

El dirigente que sea elegido presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) dirigirá los destinos de la entidad hasta septiembre de 2018, pues debe completar la actual gestión que comenzó el 1 de septiembre del año pasado en Trinidad con la segunda reelección de Carlos Chávez.

El artículo 40 del Reglamento del Estatuto Orgánico de la FBF indica el camino a seguir en caso de acefalía de la presidencia: “Si por cualquier causal o circunstancia se produjera acefalía en la presidencia de la FBF, y ésta no hubiere alcanzado dos tercios del periodo de funciones; asumirá la presidencia el primer vicepresidente, y en su defecto el segundo vicepresidente hasta la realización de un próximo congreso, a convocarse en los próximos tres meses al hecho, para la elección del reemplazante por el periodo restante del mandato”.

Por una instructiva de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), las gestiones de sus confederaciones y asociaciones afiliadas deben ser de cuatro años. En el caso de Bolivia el ciclo es de un mundial a otro. La Liga y la Asociación Nacional de Fútbol (ANF) también adecuaron sus estatutos para ir a la par.

Como Carlos Chávez está detenido preventivamente en la cárcel de Santa Cruz, los delegados acreditados serán 28, 12 de la Liga y 12 de la ANF más los cuatro integrantes del Ejecutivo (Marco Ortega, Fredy Cortez, Wálter Torrico y Wálter Zuleta).

Ortega, en su condición de presidente interino, dirigirá el congreso y votará en caso de que sea necesario dirimir un empate. Para ser elegido presidente se necesitan dos tercios de 27 delegados. En caso de que ninguno llegue a esa cantidad habrá segunda vuelta con los dos que más adhesiones recibieron.