Buscador

jueves, 2 de junio de 2016

La selección trabaja a puertas cerradas y restringe la información



Día que pasa se hace más difícil enterarse de lo que hace la selección nacional en Orlando, donde se prepara para su debut contra Panamá, el lunes 6, por la Copa América Centenario. Este jueves, por determinación del técnico, Julio César Baldivieso, el entrenamiento fue a puertas cerradas.

Enviados especiales de los diarios La Razón y El Deber, y de Radio Panamericana no pudieron ver ni siquiera la primera parte del trabajo, pues cuando los jugadores terminaban de alistarse para empezar el calentamiento fueron invitados a abandonar el complejo donde la Verde cumple su labor.

Según el reglamento de la Copa, los medios pueden estar presentes en el trabajo de una selección durante 15 minutos, ya sea al comienzo o al final. En este caso, en Bolivia ni siquiera eso.

El cuarto de hora se pasó mientras el grupo se cambiaba los botines para ingresar a la cancha. Cuando la labor de ingreso en calor comenzaba, la cobertura se terminó.

El ESPN World Wide Sports, el complejo donde se entrena Bolivia, cuenta con un servicio privado de seguridad que no permite nada que esté restringido. Los guardias tienen clara la nómina de quiénes están autorizados para ingresar a sus instalaciones y lo que están habilitados a hacer. El resto no tiene cabida.

Un vehículo del recinto traslada a los periodistas acreditados hasta la zona de parqueos en un viaje que dura unos cinco minutos. De ahí, cada quien se va por su cuenta.

En la jornada la información fue restringida al extremo, porque aparte de impedir ver la práctica, ni cuerpo técnico ni jugadores dieron declaraciones.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario