La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) aprobó ayer un nuevo estatuto para que la institución “siempre esté por encima de intereses particulares” y evite nuevos manejos irregulares como los de su anterior administración, según afirmó ayer su presidente, el paraguayo Alejandro Domínguez.
El proyecto de reforma del estatuto de la Conmebol fue aprobado en un congreso extraordinario celebrado en Lima tras concluir el sexagésimo sexto congreso ordinario, donde la nueva administración del organismo presentó el presupuesto para 2016, con superávit de 21,6 millones de dólares. Domínguez aseguró en conferencia de prensa que el nuevo estatuto “descentraliza el poder al discriminar entre funciones políticas y de gestión, promueve un equilibrio de poderes y crea comisiones de veeduría y control con obligaciones claras”.
“Las reformas aprobadas permitirán seguir avanzando en la cruzada de construir una nueva Conmebol que vuelva a tener al fútbol como eje central y promueva su desarrollo en toda Sudamérica mediante una gestión profesional, transparente, confiable y sustentable”, resaltó Domínguez.
“Cuando entré como presidente me encontré una institución que tenía como fin el dinero y como medio el fútbol. Hoy (por ayer), el único objetivo que tenemos es desarrollar el fútbol”, sentenció.
El presidente de la Conmebol manifestó su convicción en no firmar ningún contrato con intermediarios ni con empresas que estén bajo sospecha o que tengan malas prácticas, para no repetir casos como los ocurridos en la anterior administración con Datisa y Global Sports. Domínguez lamentó que la Conmebol esté forzada a cumplir el contrato con Datisa de venta de derechos televisivos de las Copas América de 2015, 2016, 2019 y 2023, cuyas irregularidades desencadenaron una cadena de detenciones en el anterior comité ejecutivo en el marco del escándalo de corrupción de la FIFA.
Indicó que la actual edición de la Copa Sudamericana no reporta beneficios económicos para la Conmebol por el incumplimiento del contrato de la empresa Global Sports.
EFE
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