El balón del Apertura 2017 rodará desde este sábado. Así lo confirmó el presidente de la Liga, Marco Peredo, tras una extensa reunión con los directivos de Real Potosí y Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol). El club lila es el que más deuda tiene con sus jugadores, pero ya llegaron a un acuerdo para garantizar que el calendario del balompié profesional no se modifique.
“Todos los problemas han sido resueltos. Se ha llegado a un acuerdo con los jugadores de los diferentes clubes que tenían deudas pendientes”, afirmó Peredo a los medios de comunicación local en conferencia de prensa. “Solo hay que esperar al sábado”, agregó el titular liguero conforme con los resultados de las gestiones que se llevaron adelante para no aplazar el arranque del primer torneo del año.
El problema más complejo era el del equipo lila, ya que la deuda con sus futbolistas asciende los 250.000 dólares. “Se ha establecido un plan de pago con garantía”, explicó Peredo. La dirigencia del equipo de la Villa Imperial debe, además de sueldos, premios por clasificación a Copa Sudamericana. Todo está listo para que el sábado se midan Nacional Potosí y Petrolero del Chaco, en el Víctor Agustín Ugarte.
De frente a los árbitros
Peredo afirmó que el incremento a los jueces de los partidos se va a analizar, pero no van a aceptar amenazas. “Vamos a analizar, el árbitro que no quiera dirigir, que no dirija y no dirige más”, informó el directivo. La dirigencia liguera también espera un mejor rendimiento físico de los colegiados. “Este país es pura amenaza, tenemos que sentarnos a conversar con la comisión de árbitros”, concluyó.
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