El cuerpo técnico de la selección Nacional se dio modos para evitar que los medios conozcan el posible onceno que presentará mañana ante Chile, por la fecha 16, de eliminatorias sudamericanas.
El equipo lo tiene definido el entrenador Mauricio Soria, quien ayer aprovechó el “día del peatón” para entrenar a las 16.00 en el estadio Hernando Siles, cuando todo apuntaba a que la Verde realice su entrenamiento por la noche. Las puertas del Siles estaban cerradas e integrantes del cuerpo técnico dieron una vuelta en los exteriores del escenario para evitar que nadie logre ver algo de la práctica.
Soria dio una pauta de lo que quiere mostrar el sábado, cuando alineó a Carlos Lampe en el arco; Diego Bejarano, Ronald Raldes, Edward Zenteno en la defensa; Alejandro Chumacero, Diego Wayar, Leonel Justiniano, Juan Carlos Arce, Jhasmani Campos o Pablo Escobar en el mediocampo; Marcelo Martins y Gilbert Álvarez en la delantera.
Las variantes que podría incluirse serían la presencia de Jorge Flores como lateral izquierdo y conformar la última línea de cuatro jugadores. La otra sería la presencia de Pablo Escobar en lugar de Campos, pero mantener el dibujo táctico de 3-4-1-2.
“El equipo llega muy bien, mañana (hoy) tendremos un entrenamiento más que se hará un trabajo de recuperación para afrontar el partido el martes”, dijo el preparador físico Mauricio Gonzáles.
Para cualquier cuerpo técnico de una selección es difícil trabajar en la parte física, por el poco tiempo de trabajo que se tiene y por la intensidad en qué se juega en las eliminatorias sudamericanas. “Cada futbolista viene de un club profesional, en el cuál se emplea una metodología diferente de trabajo. En Bolivia tenemos muchos entrenadores extranjeros, cada uno aplica una tarea diferente y los jugadores tienen un rendimiento físico diferente. Algunos trabajan más fuerza, otros trabajan con pelota. Ante esa heterogeneidad tratamos de optimizar el rendimiento de ellos”, agregó Gonzáles.
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