Las primeras instituciones que emprendieron esto proceso fueron: Bolívar, The Strongest y San José, luego continuaron Oriente Petrolero, y Blooming, Petrolero de Yacuiba y Wilstermann durante la jornada del viernes.
Sport Boys con sus representantes Óscar Rivero, Javier Suárez y Christian Rojas; Guabirá con Ronald Paz y Roberto Limpias, y Universitario con Gonzalo Quiroga entregaron sus papeles a Carlos Aragonés, gerente nacional de licencia de clubes de la Federación Boliviana de Fútbol.
Los únicos planteles que no comenzaron con este trámite son: Nacional Potosí y Real Potosí, mientras, Aurora (campeón de la Copa Simón Bolívar) y el campeón del segundo torneo de la Simón Bolívar, que está en pleno desarrollo, ascenderán al profesionalismo en 2018 y tendrán más tiempo para colocarse a la par del resto de las entidades.
En la documentación que presentaron estos diez clubes debían mencionar si cuentan con infraestructura propia para entrenarse o para el funcionamiento de sus oficinas o en caso de no contar con una propiedad mostrar el contrato de alquiler de los predios, presentar los estatutos del club, demostrar los ingresos y egresos económicos, contar con un plan de trabajo a cinco años para las divisiones menores, entre otros requisitos.
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