La crisis de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) se reflejó en los resultados de la selección boliviana y la inestabilidad de su cuerpo técnico. Los cambios en la presidencia provocaron también relevos en los entrenadores.
Cuando Carlos Chávez fue detenido el seleccionador era Mauricio Soria, que había logrado clasificar a la Verde a la segunda fase de una Copa América luego de 18 años.
Como Chávez dejó la FBF, Marco Ortega se hizo cargo y contrató a Julio César Baldivieso. Rolando López, que asumió como titular federativo en enero de 2016, lo mantuvo en el cargo pero la Selección no sumó ni un punto en la Copa América Centenario 2016.
Tras este fracaso, “Baldi” dejó la Verde en manos de Ángel Guillermo Hoyos, que dirigió seis partidos en las Eliminatorias, incluido un empate como visitante frente a Chile.
Sin embargo, ese histórico punto conseguido en Chile y la victoria como local ante Perú quedaron en la nada, pues estas dos selecciones impugnaron la actuación del paraguayo naturalizado boliviano Nelson Cabrera.
La FBF, ya con Marco Peredo como titular y Mauricio Soria como DT, intentó revertir esta situación pero fue imposible. La Verde quedó prematuramente sin chances de llegar al Mundial de Rusia, aunque sólo le alcanzaba con cálculos matemáticos.
Siguiendo la lógica de los cambios, César Salinas llegó al sillón presidencial y contrató a César Farías. La inestabilidad no terminó ahí, pues la FBF tuvo que invitar a Daniel Farías, hermano de César, para un amistoso con Corea del Sur.
Hasta el momento, no hay nada cierto sobre el futuro de la Selección. Farías sigue fungiendo como DT de The Strongest y la dualidad de funciones ha recibiódo muchas críticas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario